miércoles, 18 de diciembre de 2013

HE DADO A REVISAR "DESPUÉS DE LA DESBANDÁ"

La Desbandá es una novela que escribí como resultado de una ardua investigación personal sobre el éxodo malagueño del 7 de febrero de 1937.

Todos los niños de mi generación crecimos oyendo a nuestros padres y vecinos hablar de ese drama espantoso. Pero también éramos escolares de la enseñanza franquista. Cuando alcancé la adolescencia, los relatos oídos de niño me parecían fábulas demasiado sangrientas y nada creíbles.

Viví muchos años de mi juventud sin recordar esos hechos. Mientras permanecía en países sudamericanos, iba mucho a Nueva York, más por placer que por motivos profesionales. En una ocasión, viajé por error un día antes de lo debido; observando que ya conocía Nueva York, sus atractivos turísticos y sus museos muy a fondo, me encontré una tarde con que no sabía qué hacer. Estaba en un hotel de la Séptima Avenida y bajé caminando. En Times Square, me paré a pensar si ir a un musical (hay muchas taquillas en ese punto, pero yo los había visto todos ya) Mientras meditaba, me dio por volver atrás la cabeza y me di cuenta de que estaba a la puerta del "New York Times".

Por aburrimiento, me dio por visitar la fantástica hemeroteca de este periódico. Sin buscar nada en concreto, me topé con una noticia sobre Málaga de mediados de febrero de 1937. Abrí el microfilm por curiosidad, y me encontré con una crónica tremenda del éxodo de Málaga. El periodista consideraba que era el éxodo más dramático que se había registrado en la historia de Europa hasta entonces (todavía no había empezado la GuerraMundial)

Naturalmente, mis recuerdos infantiles se avivaron, recrudecidos. En busca de comprender del todo qué había pasado, la siguiente vez que vine a España busqué en hemerotecas, sin dar con nada, ni siquiera en la de ABC de Madrid (que ya existía entonces).

Tuve que viajar a Londres, donde encontré muchas crónicas escalofriantes.

Pero, a la larga, lo que más escalofríos me causaba era el silencio en España. Se habla mucho de Guernica, donde creo que murió SÓLO UNA PERSONA, pero no de los más de doscientos bombardeos de Málaga ni de la entrega deliberada Y GRATIS de Málaga a los rebeldes para acortar el frente.

LAS DOS FACCIONES ENFRENTADAS EN LA GUERRA CIVIL GUARDARON DURANTE MÁS DE 70 AÑOS UN OMINOSO Y AVEGONZADO SILENCIO SOBRE LA MASACRE DE LOS MALAGUEÑOS.

Ahora, los periódicos hablan de "la desbandá", copiando el título de mi libro pero sin citarme. Cosas de Málaga.

Por peticiones de lectores, escribí DESPUÉS DE LA DESBANDÁ hace ocho o nueve años, pero no me gustaba nada. Luego, de vez en cuanto he metido mano (porque uno no considera haber acabado una obra hasta que no se publica)

A causa de mi proyecto de abrir una tienda de lectura online, el domingo pasado terminé DESPUÉS DE LA DESBANDÁ. Como no se trata ya de una crónica, sino de una fabulación sentimental, se lo he dado a leer a un amigo cualificado para ver si resulta creíble.